Si pusiéramos en una pizarra todos los tipos de masajes que existen nos faltaría espacio, y es que actualmente, son muchos los masajes que nos ofrecen para relajar nuestro cuerpo y mente durante unas horas.
Hacerse un masaje en Madrid siempre es una buena opción, así aprovechas y visitas la capital y su encanto. Además, Madrid tiene muchos sitios en los que relajarte con infinidad de técnicas de masajes.
No obstante, en este caso queremos hablarte del masaje de tejido profundo y el masaje sueco. ¿Los conoces? ¿Sabes cuál es la diferencia entre ambos? Si no es así, sigue leyendo que nosotros te lo contamos.
¿Qué es el masaje de tejido profundo?
El masaje de tejido profundo se ha vuelto cada vez más popular en los últimos años. Es una técnica destinada a penetrar en las estructuras más profundas del tejido del músculo y la fascia, también llamado tejido conectivo.
Utiliza mucho de los movimientos del quiromasaje, aunque, por lo general la presión es más intensa. Está más centrado en liberar la tensión o nudos musculares.
Este tipo de masaje es útil para aquellos que han trabajado demasiado sus músculos, por deporte, por levantar objetos pesados o incluso por inactividad.
El masaje de tejido profundo penetra en la profundidad del músculo, calentándolo y haciendo que toda el área sea más fluida y móvil. Al aplicar presión profunda de manera constante, con movimientos lentos y profundos, los músculos y el tejido cicatricial se aflojan.
Este masaje es similar al masaje sueco, el cual se centra en mejorar la circulación de la sangre linfática y a relajar los músculos superficiales. A continuación, te explicamos qué es el masaje sueco y en qué se diferencia del masaje de tejido profundo.
¿Qué es el masaje sueco?
El masaje sueco es uno de los más practicados en Occidente y debe su origen al fisiólogo sueco Pehr Henrik Ling, quien unió sus conocimientos como instructor de gimnasia con las técnicas de masaje que aprendió en su viaje a China, desarrollando el famosos y terapéutico “masaje sueco”.
Este masaje emplea 5 técnicas: deslizamiento, amasamiento, vibración, percusión y fricción.
Su finalidad es la de eliminar tensiones y reafirmar los músculos y las articulaciones, devolviendo al cuerpo su energía y equilibrio natural.
Con las 5 técnicas se consigue relajar el cuerpo y la mente del paciente. Además, los movimientos lentos y suaves eliminan el estrés y mejoran la circulación aliviando el dolor corporal y potenciando un efecto tonificante y revitalizante.
El masaje sueco se recomienda cuando existen contracturas, esguinces, artritis, calambres, síndrome del túnel carpiano, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares ya sean crónicos o temporales.
Por otro lado, también es recomendable cuando existen problemas circulatorios o cuando se sufre cansancio, estrés, ansiedad o insomnio, entre otros.
¿Cuál es la diferencia entre masaje sueco y masaje de tejido profundo?
Existen algunas diferencias clave entre el tipo de masaje de tejido profundo y el masaje sueco. Según los especialistas, también debe incluir la intención del masaje, la presión aplicada y el área principal de enfoque.
El masaje de tejido profundo es similar al masaje sueco, pero, como ya hemos mencionado, con una aplicación de presión más profunda, beneficiosa para soltar tensión muscular crónica.
El enfoque se encuentra en las capas más profundas del tejido muscular, tendones y fascia (una red tridimensional de tejido conectivo que rodea, penetra y soporta todos los músculos, huesos, nervios y órganos).
Mientras que el masaje sueco se centra en mejorar la circulación de la sangre linfática y relajar los músculos superficiales. El masaje de tejido profundo se centra en el tejido conectivo, y el objetivo es producir cambios en la libertad de movimiento y en la postura.
El masaje sueco, conocido como el masaje clásico, consiste en un conjunto específico de movimientos de masaje: movimientos de deslizamiento, fricción, vibración y percusión.
Tradicionalmente también incluye movimientos articulares pasivos y activos, estirando y doblando las articulaciones.
El masaje de tejido profundo se centra en estirar la fascia. Trabaja capa por capa a través del tejido conectivo y los músculos hasta las capas más profundas, para crear libertad de movimiento por la liberación de adherencias fasciales y contracturas musculares crónicas.
Para aquellos que buscan relajarse y descansar, un masaje sueco puede hacer maravillas.
